Tiene 50 diamantes negros de dos quilates y es el más caro de los trajes de cóctel creado hasta el momento. Sólo lo supera uno de baile que ronda los 30 millones de dólares.
Poner el cuerpo dentro de esta pieza de arte es casi como subir a la cima del mundo. En especial si la mujer (o caballero) en cuestión ama el lujo y el glamour. Un traje que no está al alcance de Mariana Nannis, por dar sólo un ejemplo.
El vestido más caro del mundo (de la categoría cóctel) fue creado por Debbie Wingham y tiene un valor de nada menos que 5,7 millones de dólares. Apareció en la semana de la moda de Ucrania, custodiado claro está.
El bello atuendo está decorado con 50 diamantes negros de dos quilates. Una prenda magestuosa que se vio acompañada por otros diseños donde también se incorporaron piedras preciosas.
Claro que semejante noticia atrajo la mirada de los expertos en récords. Por eso el vestido ya ingresó al libro de los Guiness. Su creadora dice que es: “El himno de una hermosa mujer que ama la vida”.
Antes de éste traje uno de los más caros conocidos era el vestido blanco que usó Marilyn Monroe y con el cual logró una de las fotos más famosas de la historia. En una subasta este vestido se vendió a 4,6 millones de dólares.
Existe otra creación en el mundo digna de atención. Se llama ‘Nightingale of Kuala Lumpur’ (El Ruiseñor de Kuala Lumpur) y cuesta la módica suma de 30 millones.
El vestido (de baile) necesitó 7 meses de trabajo y tiene un bordado con 700 diamantes. Además cuenta con un detalle central, un diamante de 70 quilates.